¿Algún plan para la cena del cuarto jueves de noviembre? ¡Ajá! Acabas de dar en el calvo. Nada. Un agujero en la agenda en el que encaja la tradición que más nos ha costado importar de Estados Unidos, pero que parece hecha a medida para nosotros: Acción de Gracias. Una larga reunión entorno a una mesa en la que solo hay un objetivo: zampar hasta reventar. Y, sí, dar gracias, pero con la boca llena de suculenta comida.

Si hemos adoptado Halloween, el Black Friday, hemos abierto la puerta a un gordito barbudo vestido de rojo (cuando es de cajón que tres pueden cargar más regalos que uno) y hasta hemos puesto en peligro de extinción el vermut a favor del brunch, ¿por qué nos resistíamos a abrir los brazos de par en par a una celebración que no pisa ninguna otra y que nos permite disfrutar de una magnífica sobremesa?

Si nos saltamos el origen algo colono de la tradición, la excusa de poder organizar una comilona con los seres queridos, siempre apetece. Además, los platos que se sirven están para chuparse los dedos. Ponte el delantal porque este año toca celebrar Acción de Gracias.

La lista de invitados

En Estados Unidos, Thanksgiving es el día de la familia. Trabajen donde trabajen, estudien donde estudien, estén en la prisión que estén, el cuarto jueves de noviembre todos el mundo libra para cruzar el país y encontrarse. Solo en las series de televisión hay excusa para no llegar a tiempo de probar el pavo cocinado por mamá o papá. Teniendo en cuenta que nosotros usamos las Navidades para reunir abuelos, tías y hermanos entorno a una mesa, podemos aprovechar Acción de Gracias para invitar a los amigos. ¿No es bonito?

El primer paso es crear el grupo de WhatsApp para informar del evento, buscar un voluntario que traiga un par de sillas y enviar algún gif adorable o de “Los Simpson”, que siempre hay sobre cualquier tema.

Alguien responderá con la versión subida de tono (vamos, porno) que, como en el caso de “Los Simpson”, siempre hay sobre cualquier tema.

La comilona

Añade y quita lo que te apetezca, pero, en mi mesa, no falta el pavo con su stuffing (relleno) y el gravy (salsa del asado), puré de patatas al estilo americano, salsa de arándanos, mazorcas, verduritas, pastel de boniato con marshmallow y american pie.

Te va a tocar pasar tiempo en la cocina. ¡Pero si yo trabajo! Que no cunda el pánico, hay trucos para no perder todo el día mirando la puerta del horno como si fuera el día que descubriste el portal de HBO. Las bolsas de asar se han inventado para reducir a la mitad el tiempo de cocción del súperpavo que vas a encargar unos días antes en tu pollería habitual. Aquí tienes una receta práctica, fácil y jugosa que no te hará soñar lo que quede del año en pavos. Pero ándate con ojo y, antes de cargar con un animalito desplumado y resbaladizo del peso de una garrafa de agua, comprueba que te quepa en el horno.

Una de las mejores opciones en Barcelona para encontrar ingredientes y utensilios que usarían en cualquier serie americana son las tiendas Taste of America. En su página web ya tienen un apartado ‘especial Thanksgiving’.

Dar las gracias

Y ya que estamos, una vez reunidos todos alrededor de la mesa y antes de encender el cuchillo eléctrico que te habrás comprado porque ¿quién no quiere un cuchillo eléctrico para cortar el pavo?, haced una ronda para que cada uno de las gracias por algo. Es bonito, reflexivo y siempre habrá alguien que dará las gracias por algo subido de tono (vamos, porno).

Desfile, series y fútbol americano

En Estados Unidos cocinan viendo el mítico desfile de Macy’s en Nueva York y se espachurran en el sofá después de los postres para ver el partido de ese rugby que tienen con nombre de deporte que se juega con los pies. Pero lo bueno de una gran comida es poder alargar la sobremesa. Hablad, reíd, brindad y acabad abrazados unos a otros celebrando la amistad que os une y jurando, cuchillo eléctrico en alto, que a, partir de hoy, en Barcelona también se celebrará Acción de Gracias todos los años.

Puestos, terminad la jornada recuperando alguno de los míticos episodios de Acción de Gracias de “Friends” o la peli dirigida por Jodie Foster “A casa por vacaciones”.

El día después

A la mañana siguiente te despertarás y verás la cocina impracticable, pero también que todo está rebajado a la mitad. Sí, el Black Friday ya es nuestro también. Mientras picas de las sobras y te das cuenta de que aquí no es fiesta y que llegas tarde al trabajo, vas viendo como los amigos van abandonando el grupo que creaste de WhatsApp. Al final, también lo harás tú dejando de administrador el único que nunca sabe marcharse de los sitios ni que sean virtuales. God bless America!

Si hemos adoptado Halloween, el Black Friday, hemos abierto la puerta a un gordito barbudo vestido de rojo (cuando es de cajón que tres pueden cargar más regalos que uno) y hasta hemos puesto en peligro de extinción el vermut a favor del brunch, ¿por qué nos resistíamos a abrir los brazos de par en par a una celebración que no pisa ninguna otra y que nos permite disfrutar de una magnífica sobremesa?

Si nos saltamos el origen algo colono de la tradición, la excusa de poder organizar una comilona con los seres queridos, siempre apetece. Además, los platos que se sirven están para chuparse los dedos. Ponte el delantal porque este año toca celebrar Acción de Gracias.

La lista de invitados

En Estados Unidos, Thanksgiving es el día de la familia. Trabajen donde trabajen, estudien donde estudien, estén en la prisión que estén, el cuarto jueves de noviembre todos el mundo libra para cruzar el país y encontrarse. Solo en las series de televisión hay excusa para no llegar a tiempo de probar el pavo cocinado por mamá o papá. Teniendo en cuenta que nosotros usamos las Navidades para reunir abuelos, tías y hermanos entorno a una mesa, podemos aprovechar Acción de Gracias para invitar a los amigos. ¿No es bonito?

El primer paso es crear el grupo de WhatsApp para informar del evento, buscar un voluntario que traiga un par de sillas y enviar algún gif adorable o de “Los Simpson”, que siempre hay sobre cualquier tema.

Alguien responderá con la versión subida de tono (vamos, porno) que, como en el caso de “Los Simpson”, siempre hay sobre cualquier tema.

La comilona

Añade y quita lo que te apetezca, pero, en mi mesa, no falta el pavo con su stuffing (relleno) y el gravy (salsa del asado), puré de patatas al estilo americano, salsa de arándanos, mazorcas, verduritas, pastel de boniato con marshmallow y american pie.

Te va a tocar pasar tiempo en la cocina. ¡Pero si yo trabajo! Que no cunda el pánico, hay trucos para no perder todo el día mirando la puerta del horno como si fuera el día que descubriste el portal de HBO. Las bolsas de asar se han inventado para reducir a la mitad el tiempo de cocción del súperpavo que vas a encargar unos días antes en tu pollería habitual. Aquí tienes una receta práctica, fácil y jugosa que no te hará soñar lo que quede del año en pavos. Pero ándate con ojo y, antes de cargar con un animalito desplumado y resbaladizo del peso de una garrafa de agua, comprueba que te quepa en el horno.

Una de las mejores opciones en Barcelona para encontrar ingredientes y utensilios que usarían en cualquier serie americana son las tiendas Taste of America. En su página web ya tienen un apartado ‘especial Thanksgiving’.

Dar las gracias

Y ya que estamos, una vez reunidos todos alrededor de la mesa y antes de encender el cuchillo eléctrico que te habrás comprado porque ¿quién no quiere un cuchillo eléctrico para cortar el pavo?, haced una ronda para que cada uno de las gracias por algo. Es bonito, reflexivo y siempre habrá alguien que dará las gracias por algo subido de tono (vamos, porno).

Desfile, series y fútbol americano

En Estados Unidos cocinan viendo el mítico desfile de Macy’s en Nueva York y se espachurran en el sofá después de los postres para ver el partido de ese rugby que tienen con nombre de deporte que se juega con los pies. Pero lo bueno de una gran comida es poder alargar la sobremesa. Hablad, reíd, brindad y acabad abrazados unos a otros celebrando la amistad que os une y jurando, cuchillo eléctrico en alto, que a, partir de hoy, en Barcelona también se celebrará Acción de Gracias todos los años.

Puestos, terminad la jornada recuperando alguno de los míticos episodios de Acción de Gracias de “Friends” o la peli dirigida por Jodie Foster “A casa por vacaciones”.

El día después

A la mañana siguiente te despertarás y verás la cocina impracticable, pero también que todo está rebajado a la mitad. Sí, el Black Friday ya es nuestro también. Mientras picas de las sobras y te das cuenta de que aquí no es fiesta y que llegas tarde al trabajo, vas viendo como los amigos van abandonando el grupo que creaste de WhatsApp. Al final, también lo harás tú dejando de administrador el único que nunca sabe marcharse de los sitios ni que sean virtuales. God bless America!

mm
Solo llego puntal cuando voy al cine, no sé resistirme a un mal plan y soy tan inútil orientándome que me perdería en mi propio museo. Espero que algún día declaren las patatas chips pilar de la dieta mediterránea. Me acompaña un ratón vaquero de nombre Cowmouse.