Un festival se puede entender como un homenaje a la música, pero también es una terapia única para llenar tu mochila de optimismo y experiencias vitales inolvidables.
La terapia (Foto cortesía de Rototom Sunsplash)
El Rototom ha sido mi terapia personal, pero hay para todos los gustos. Si aún no has disfrutado la tuya, el verano tiene cuerda para rato, y todavía nos ofrece excelentes (y muy variadas) propuestas terapéuticas a ritmo de festival.
Ya me lo habían advertido: “el Rototom es mucho más que un festival Reggae“.
Y vaya si lo es. Junto con la pulsera que me daba acceso a tres días de buena música y mejores experiencias, me entregaron el programa de actividades.
Cualquiera esperaría un simple flyer, pero lo que recibí fue un periódico de 11 páginas a todo color con un impactante titular: “¡BIENVENIDO A LA TIERRA DE LOS SUEÑOS!”. Me recorrió la espalda un escalofrío que interpreté como una señal evidente de que tras las puertas del Rototom Sunsplash se escondía mucho más de lo que podía haber imaginado.
[redbox text=”El Rototom es mucho más que un festival Reggae.” position=”right”]
Al llegar a la zona de acampada respiré hondo. Percibí de inmediato que no se trataba de un simple camping, sino de una tranquila comunidad alojada en “casas” de tela de colores, poblada por personas de todo el mundo con las que compartir momentos de camaradería y relax.
En cuanto a las actividades, tal y como su nombre indica (Sunsplash), se prolongan desde que el sol se zambulle en el mar hasta que vuelve a salir para inaugurar un nuevo día:
Actividades infantiles en “Magicomundo” (Foto cortesía de Rototom Sunsplah)
– Impresionantes conciertos de reggae, dub, ska o dancehall
– Artistas de la talla de Derrick Morgan, Alborosie, Marcia Griffiths, Alpha Blondie, Barrintong Levy…
– Talleres de terapias naturales
– Cursos de danza y circo
– Workshops de fotografía
– Simposios del “Foro Social”
– Proyecciones del University Reggae Camp
– Momentos de encuentro y reflexión en “Vive la energía”
– Exposiciones de la House of Rastafari
– Actividades infantiles en “Magicomundo”
– Bailes sobre la arena en el Rototom Sunbeach
…
Sí, la tierra de los sueños.
La terapia (Foto cortesía de Rototom Sunsplash)
El Rototom ha sido mi terapia personal, pero hay para todos los gustos. Si aún no has disfrutado la tuya, el verano tiene cuerda para rato, y todavía nos ofrece excelentes (y muy variadas) propuestas terapéuticas a ritmo de festival.
Ya me lo habían advertido: “el Rototom es mucho más que un festival Reggae“.
Y vaya si lo es. Junto con la pulsera que me daba acceso a tres días de buena música y mejores experiencias, me entregaron el programa de actividades.
Cualquiera esperaría un simple flyer, pero lo que recibí fue un periódico de 11 páginas a todo color con un impactante titular: “¡BIENVENIDO A LA TIERRA DE LOS SUEÑOS!”. Me recorrió la espalda un escalofrío que interpreté como una señal evidente de que tras las puertas del Rototom Sunsplash se escondía mucho más de lo que podía haber imaginado.
[redbox text=”El Rototom es mucho más que un festival Reggae.” position=”right”]
Al llegar a la zona de acampada respiré hondo. Percibí de inmediato que no se trataba de un simple camping, sino de una tranquila comunidad alojada en “casas” de tela de colores, poblada por personas de todo el mundo con las que compartir momentos de camaradería y relax.
En cuanto a las actividades, tal y como su nombre indica (Sunsplash), se prolongan desde que el sol se zambulle en el mar hasta que vuelve a salir para inaugurar un nuevo día:
Actividades infantiles en “Magicomundo” (Foto cortesía de Rototom Sunsplah)
– Impresionantes conciertos de reggae, dub, ska o dancehall
– Artistas de la talla de Derrick Morgan, Alborosie, Marcia Griffiths, Alpha Blondie, Barrintong Levy…
– Talleres de terapias naturales
– Cursos de danza y circo
– Workshops de fotografía
– Simposios del “Foro Social”
– Proyecciones del University Reggae Camp
– Momentos de encuentro y reflexión en “Vive la energía”
– Exposiciones de la House of Rastafari
– Actividades infantiles en “Magicomundo”
– Bailes sobre la arena en el Rototom Sunbeach
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Sí, la tierra de los sueños.
