Cuando despega un avión, comienza uno de esos pocos momentos en los que podemos permitirnos no hacer absolutamente nada. O aprovechar para recuperar el saludable hábito de leer del que ya casi te has olvidado. Aquí tienes unos cuantos libros perfectos para leer durante un vuelo.

El principito, de Antoine de Saint-Exupéry

Si vas a hacerte un Madrid – Suecia el próximo fin de semana (así, al tun tun), seguro que te dará tiempo a leerte uno de los mejores libros de la historia. Y es que El principito continúa conquistando los corazones de todos aquellos que olvidaron los tiempos de las caninas y los bocatas de nocilla de dos colores. Una fábula que sigue los pasos de un niño rubio y cansado de vivir en un asteroide que aún no sabe cuántas cosas hay que arreglar en la Tierra. Como remarcó su autor, “un libro para el niño que esta persona grande fue en otro tiempo”.

El coronel no tiene quien le escriba, de Gabriel García Márquez

Pensando en otro de mis libros cortos favoritos, me ha venido a la mente uno de los primeros de Gabo. Una historia cruda y algo triste que aborda la jubilación de un coronel retirado junto a su esposa y un gallo. Puede que el argumento no suene tan estimulante como una gala de Noche de Fiesta, pero El coronel no tiene quien le escriba sigue siendo algo más que un libro breve: una pequeña joyita del Nobel colombiano.

Guía de Sri Lanka, de Lonely Planet

Sí, la ficción está muy bien, pero si se trata de ser prácticos cuando vas a hacer un viaje con mayúsculas, lo suyo es comenzar a empaparse de lo que vas a encontrarte al aterrizar. Y como Sri Lanka ha sido elegido Destino 2019 por Lonely Planet no se me ocurre mejor idea que inducirte a viajar a la isla del té y los elefantes con los deberes ya hechos.

El sol y sus flores, de Rupi Kaur

Rupi Kaur es una joven canadiense de padres indios que un día comenzó a publicar poemas en Instagram hasta que una fotografía suya menstruando en la cama permitió a las masas descubrir poemarios como el que encierra El sol y sus flores. La inmigración, el amor o el feminismo son algunos de los temas abordados con extrema sensibilidad por esta nueva it-girl de la literatura que escribe cosas de la talla “cómo no quieres que sea emocional, si estoy hecha de agua”. Maravilloso, ligero y dosificable.

En la carretera, de Jack Kerouac

Allá por los años 50, las nuevas generaciones post-Segunda Guerra Mundial no se veían teniendo marido, hijos y adosado a los 25. Fue entonces cuando llegó una revolución alimentada por libros como En la carretera, precursor millenial a través de la ruta, vivencias y libertad que Kerouac escribió en un rollo de papel tras una noche de fiesta. Ideal para un vuelo transatlántico, especialmente si viajas a Estados Unidos y México, países recorridos por el autor.

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Alicantino de nacimiento, amante de cualquier lugar con mínimas de 25ºC. Mi debilidad es escribir en cafés secretos, tengo curry en las venas y una palmera tatuada (tiene su miga, aunque no lo parezca). Una vez gané un premio en Japón.