Cuando Los Hermanos Marx salían de casa, era para ir a la ópera, a las carreras, un viaje al Oeste por aquí , otro a Casablanca por allá… Eran otros tiempos: no se subían fotos ni se escribía “Aquí, sufriendo”. Antes, lo que se llevaba era hacer la peli, claro. Una de las veces que decidieron ir a formar la gozadera lejos del hogar fue para pasar la tarde en el circo. Si ellos, que de entretenimiento sabían un rato, eligieron el circo como uno de los mejores lugares para evadirse fuera de casa, ¿cómo no vais a ir con vuestros hijos a pasar un rato genial en el Circo Smile de Alex Zavatta?

Pegado al Centro Comercial Diagonal Mar, encontraréis hasta el 15 de enero la carpa de la compañía de Alex Zavatta que, para estas semanas en las que estamos todos sumergidos en pleno espíritu navideño, ponen en marcha un nuevo espectáculo. ‘Over the Top’ se inspira en los grandes circos de América y fusiona la tradición circense con los elementos más actuales. Aunque, como dice Patty Boggino –copropietaria de este show itinerante y esposa de Alex Zavatta–, “manteniendo toda su esencia”. A los culturetas entendidos en las bambalinas del “mayor espectáculo del mundo”, los apellidos Zavatta y Boggino seguro que les debe haber dibujado un gesto de aprobación en la cara, pues son dos de las dinastías más prestigiosas de este mundillo. Dos familias unidas por el matrimonio de Alex y Patty y por el amor al circo, toda una garantía de que va a desfilar antes nuestros ojos algo realmente auténtico.

Héroes que hacen falta

Si tuviéramos la mala fortuna de que una amenaza se cerniera ahora mismo sobre la Tierra por culpa de algún robot gigante con ‘petersellismo’ (vamos, la quintaesencia de la torpeza), después de ver la función del Circo Smile saldremos convencidos de que ellos podrían devolver el ‘status quo’ al mundo. Porque, viendo series y películas, todo el mundo se cree muy valiente y muy listo pero, en la vida real, otro gallo cantaría y necesitaríamos héroes. Y el equipo de Alex Zavatta cuenta con uno de los mejores: Spider-man. Ni el Duende Verde ni Octopuss ni Venom ni Lagarto. El superhéroe Marvel abre la mágica sesión de circo enfrentándose ni más ni menos que a su propio destino en la Rueda de la Muerte. Adrenalina pura en un número en el que vuestras pulsaciones aceleradas acabarán cargándose vuestros relojes ‘Michael Knight style’ (esos que todo lo saben y todo lo dicen).  

Una foto publicada por Alain Raya (@alainraya) el 30 de Nov de 2016 a la(s) 9:17 PST

¿Qué es un circo sin emociones fuertes?

Un inicio espectacular que prepara la mente y el cuerpo de grandes y pequeños para las casi dos horas de entretenimiento sin descanso de ‘Over the Top’. Porque, ¿qué es un circo sin emociones fuertes? Si a tu peluquero le pides que te ponga guapo/a, a los artistas de circo hay que pedirles que te emocionen. Gauchos argentinos, trapecistas, malabares, contorsiones que desafían a las propias leyes físicas… El Circo Smile le da una vuelta de tuerca a los números más emblemáticos del arte circense. Tal y como queda demostrado en el número protagonizado por la pareja de contorsionistas, y para la que hay que ponerse muy serio para describirla.

Circo Smile

Mucha disciplina y trabajo duro hay detrás de la belleza plástica de este número donde se ejecutan ejercicios clásicos, pero desde una novedosa perspectiva gracias a la influencia de videoclips como ‘Try’ de P!nk o los protagonizados por la bailarina Maddie Ziegler para Sia. Un auténtico disfrute sensorial. Por no hablar de la mística que envuelve la lucha del hombre contra la gravedad en el ejercicio de la barra vertical, la elegancia de la actuación de la ninfa del bosque sobre un ‘slide’ o las fascinantes figuras en el trapecio sin red, realizadas con precisión por Kimberly Zavatta, quien ya dejó ‘vizconti’ de la impresión al jurado del programa ‘Tú sí que vales’, allá por 2012. Os aseguramos que todas las actuaciones son canela fina. Para alucinar más que con hongos matamoscas en un ritual siberiano.     

Ni un segundo que perder

Además, el Circo Smile no para ni un segundo. Ni siquiera entre números, pues su banda de payasos se cuela entre el público para bailar, cantar y zambullirnos en esta fiesta tan especial. La interacción de la compañía convierte a los asistentes en protagonistas de la función. Especialmente a los papás, que tienen un peso muy importante en uno de los números sorpresa de la tarde. Observar la cara de emoción y orgullo de los más pequeños al ver a sus padres convertidos en amos de la pista hará que se os derrita la patatita.     

Payasos de los buenos, arte y risas

Algún lector de los 70 u 80 que haya visto escritas las palabras ‘payasos’ e ‘interacción’ probablemente haya escondido la cabeza debajo de la manta. Sí, esa, nuestra generación, que creció traumatizada por el payaso de ‘Poltergeist’ y Pennywise de Stephen King, y que inventamos la  coulrofobia (miedo a los payasos). ¡Aleja ese miedo y compórtate como un Gryffindor (Entrenador Pokémon del Equipo Rojo también valdría)! Primero, la manta no te va a salvar de nada (¿no aprendiste nada de Twisty el Payaso de ‘American Horror Story’, alma cándida?). Segundo, el ‘clowning’ del Circo Smile es genuino y puro arte. El mismo arte que fascinó a genios como Degas, Renoir, Seurat o Toulouse-Lautrec, que pasaron intensas tardes documentando en sus lienzos las funciones del Cirque Fernando donde, casualmente, actuaron Buster Keaton y Achille Zavatta, maestros del ‘slapstick’ y la pantomima. La tradición del humor visual e hiperbólico sigue viva en el Circo Smile con los elementos más sencillos, pero con el 100% de efectividad para arrancar carcajadas y aplausos: objetos gigantes, llantos en modo ‘cataratas Victoria’, camisetas de algodón interminables que nunca podrás quitarte, boxeadores con ganchos a lo Bud Spencer…

Un oficio, el circo, que actualmente podría catalogarse hasta de revolucionario y subversivo, pero con un objetivo admirable: unir a las familias para un rato de maravillosa distracción.    

Pegado al Centro Comercial Diagonal Mar, encontraréis hasta el 15 de enero la carpa de la compañía de Alex Zavatta que, para estas semanas en las que estamos todos sumergidos en pleno espíritu navideño, ponen en marcha un nuevo espectáculo. ‘Over the Top’ se inspira en los grandes circos de América y fusiona la tradición circense con los elementos más actuales. Aunque, como dice Patty Boggino –copropietaria de este show itinerante y esposa de Alex Zavatta–, “manteniendo toda su esencia”. A los culturetas entendidos en las bambalinas del “mayor espectáculo del mundo”, los apellidos Zavatta y Boggino seguro que les debe haber dibujado un gesto de aprobación en la cara, pues son dos de las dinastías más prestigiosas de este mundillo. Dos familias unidas por el matrimonio de Alex y Patty y por el amor al circo, toda una garantía de que va a desfilar antes nuestros ojos algo realmente auténtico.

Héroes que hacen falta

Si tuviéramos la mala fortuna de que una amenaza se cerniera ahora mismo sobre la Tierra por culpa de algún robot gigante con ‘petersellismo’ (vamos, la quintaesencia de la torpeza), después de ver la función del Circo Smile saldremos convencidos de que ellos podrían devolver el ‘status quo’ al mundo. Porque, viendo series y películas, todo el mundo se cree muy valiente y muy listo pero, en la vida real, otro gallo cantaría y necesitaríamos héroes. Y el equipo de Alex Zavatta cuenta con uno de los mejores: Spider-man. Ni el Duende Verde ni Octopuss ni Venom ni Lagarto. El superhéroe Marvel abre la mágica sesión de circo enfrentándose ni más ni menos que a su propio destino en la Rueda de la Muerte. Adrenalina pura en un número en el que vuestras pulsaciones aceleradas acabarán cargándose vuestros relojes ‘Michael Knight style’ (esos que todo lo saben y todo lo dicen).  

Una foto publicada por Alain Raya (@alainraya) el 30 de Nov de 2016 a la(s) 9:17 PST

¿Qué es un circo sin emociones fuertes?

Un inicio espectacular que prepara la mente y el cuerpo de grandes y pequeños para las casi dos horas de entretenimiento sin descanso de ‘Over the Top’. Porque, ¿qué es un circo sin emociones fuertes? Si a tu peluquero le pides que te ponga guapo/a, a los artistas de circo hay que pedirles que te emocionen. Gauchos argentinos, trapecistas, malabares, contorsiones que desafían a las propias leyes físicas… El Circo Smile le da una vuelta de tuerca a los números más emblemáticos del arte circense. Tal y como queda demostrado en el número protagonizado por la pareja de contorsionistas, y para la que hay que ponerse muy serio para describirla.

Circo Smile

Mucha disciplina y trabajo duro hay detrás de la belleza plástica de este número donde se ejecutan ejercicios clásicos, pero desde una novedosa perspectiva gracias a la influencia de videoclips como ‘Try’ de P!nk o los protagonizados por la bailarina Maddie Ziegler para Sia. Un auténtico disfrute sensorial. Por no hablar de la mística que envuelve la lucha del hombre contra la gravedad en el ejercicio de la barra vertical, la elegancia de la actuación de la ninfa del bosque sobre un ‘slide’ o las fascinantes figuras en el trapecio sin red, realizadas con precisión por Kimberly Zavatta, quien ya dejó ‘vizconti’ de la impresión al jurado del programa ‘Tú sí que vales’, allá por 2012. Os aseguramos que todas las actuaciones son canela fina. Para alucinar más que con hongos matamoscas en un ritual siberiano.     

Ni un segundo que perder

Además, el Circo Smile no para ni un segundo. Ni siquiera entre números, pues su banda de payasos se cuela entre el público para bailar, cantar y zambullirnos en esta fiesta tan especial. La interacción de la compañía convierte a los asistentes en protagonistas de la función. Especialmente a los papás, que tienen un peso muy importante en uno de los números sorpresa de la tarde. Observar la cara de emoción y orgullo de los más pequeños al ver a sus padres convertidos en amos de la pista hará que se os derrita la patatita.     

Payasos de los buenos, arte y risas

Algún lector de los 70 u 80 que haya visto escritas las palabras ‘payasos’ e ‘interacción’ probablemente haya escondido la cabeza debajo de la manta. Sí, esa, nuestra generación, que creció traumatizada por el payaso de ‘Poltergeist’ y Pennywise de Stephen King, y que inventamos la  coulrofobia (miedo a los payasos). ¡Aleja ese miedo y compórtate como un Gryffindor (Entrenador Pokémon del Equipo Rojo también valdría)! Primero, la manta no te va a salvar de nada (¿no aprendiste nada de Twisty el Payaso de ‘American Horror Story’, alma cándida?). Segundo, el ‘clowning’ del Circo Smile es genuino y puro arte. El mismo arte que fascinó a genios como Degas, Renoir, Seurat o Toulouse-Lautrec, que pasaron intensas tardes documentando en sus lienzos las funciones del Cirque Fernando donde, casualmente, actuaron Buster Keaton y Achille Zavatta, maestros del ‘slapstick’ y la pantomima. La tradición del humor visual e hiperbólico sigue viva en el Circo Smile con los elementos más sencillos, pero con el 100% de efectividad para arrancar carcajadas y aplausos: objetos gigantes, llantos en modo ‘cataratas Victoria’, camisetas de algodón interminables que nunca podrás quitarte, boxeadores con ganchos a lo Bud Spencer…

Un oficio, el circo, que actualmente podría catalogarse hasta de revolucionario y subversivo, pero con un objetivo admirable: unir a las familias para un rato de maravillosa distracción.    

mm
Lisérgica y de culo inquieto. De pequeña, pedí aprender a dibujar y me apuntaron a natación, porque "es más útil en caso de desastre natural, hija". Tengo el superpoder de iniciar congas. Nunca fui reina del baile en el instituto. Mientras urdo mi venganza, escribo.