Por fin nuestras aventuras salen del muro de Instagram y cumplen la noble misión de inspirar de verdad. A dónde hayas ido el año pasado, puede marcar el próximo “a dónde vamos a ir” en 2018. Y tú sin saberlo.
Ya llega FITUR 2018, señoras y señores, niños y niñas, mascotas y demás seres vivos del planeta. La Feria del Turismo Internacional, que se celebra del 17 al 21 de enero en Ifema, es nuestro evento por antonomasia. El de los viajeros, el de los que un día están aquí y el otro allí, el de los escapistas que sabemos montarnos un #remember sin romper la hucha de cerdito que nos regaló nuestra abuela cuando hicimos la Comunión. Además del paseíto y las fotos de rigor, aprovecharemos la visita a la capital de España para brindar con otros viajeros en la Sala Freedom y para conocer un poco más los “Hábitos y tendencias del turismo” de la mano de los colegas de Atrápalo. Un estudio basado en nuestras preferencias, nacionales e internacionales, y que servirán para ayudarnos los unos a los otros a seguir explorando este maravilloso lugar llamado ‘Mundo’.
Sitios que ya nos molan
No lo podemos negar. Nos gusta más una escapada que el comer. Y si durante la escapada además comemos, ya habremos alcanzado el éxtasis. Como viajeros buscamos evadirnos de la rutina los fines de semana y/o los días festivos. Pocos días en destinos cercanos a nuestra zona de confort y que incluyan actividades de ocio, como la práctica de algún deporte o visitas culturales, así como la contratación de servicios relacionados con la belleza. Presumido. ¡Qué calladito te lo tenías!
La cosa cambia para los autónomos que desconocen el concepto “fin de semana” o “día festivo” (¿no son los padres?). Ellos simplemente cambian de oficina… pero ¿y lo que mola trabajar un día en un bar frente a la Sagrada Familia y al otro realizando llamadas entre viñedos riojanos? Y es que, según el estudio, La Rioja lidera el top de destinos rurales favoritos, por delante de Segovia y Huesca. Con respecto al turismo urbano, Barcelona y Madrid siguen siendo nuestras preferencias a la hora de contratar un viajecito rápido, pero ojo que Valencia les empieza a hacer sombra. ¡Oh! Y ni os cuento lo que ha escalado Mallorca en el ranking. Bien nos gusta un postureo en la playa: la fotito de los pies en la arena está claro que no puede faltar en el Stories.
Hablando de playas, Lanzarote se convierte en el destino estrella. El simple hecho de usar el hashtag #IslasCanarias, ya garantiza un mínimo de ‘likes’. El litoral peninsular también nos gusta: la Costa del Sol (Málaga) tiene el primer lugar, seguido por Costa Blanca (Alicante) y por la Costa Dorada (Tarragona). De la toalla al agua, del agua al chiringuito, cervecita, de vuelta a la toalla y al agua… y así. El verdadero ciclo de la vida. Que no te engañen.
Para los viajeros que tienen vacaciones (si eres autónomo puedes saltarte este párrafo), Europa es un buen lugar para invertir de tres o cinco días. A Roma vamos con amor o sin él, porque nos encanta; Londres le hace un interior a París, y Lisboa pasa a colocarse cuarta.
Por último, gracias a las compañías low cost y a las ofertas de Atrápalo (que Dios os lo pague) tenemos la oportunidad de hincarle el diente a la gran manzana neoyorkina, tomar una alfombra mágica dirección Marrakech o sentirte el protagonista rico de una novela en Los Cabos (México) por cuatro duros.
Los próximos favoritos
Somos animales de costumbres y nuestros hábitos no cambian, pero sí lo hacen los destinos. Para este año, y viendo el éxito del pasado, nace el término de City Breaks -cómo nos flipan los nombrecitos en inglés-. Seguimos amando lo bucólico, pero la investigación indica que las ciudades ganan fuerza. Además de Madrid y Barcelona, en 2018 queremos conocer Sevilla, Bilbao, A Coruña, Zaragoza, Alicante…, urbes menos masificadas pero con mucho que enseñarnos. En lo rural, vamos a apagar el móvil en Guadalupe (Cáceres), olvidarnos del e-mail en Garachico (Tenerife), respirar -por fin- aire puro en Orbaneja del Castillo (Burgos) o convertir ‘el comer’ en nuestra única preocupación en Beget (Gerona).
En cuanto a la larga distancia (autónomos, lo de antes era broma: podéis viajar si seguís los carteles de ‘free wifi’), nos volvemos muy variopintos. Algunos optáis por vivir el sueño americano en Chicago, otros por encontraros a vosotros mismos en Bután e, incluso, estáis los que os va eso de pescar en el hielo en Groenlandia. Nosotros nos quedamos con Uluru, Australia, no solo por su espectacular paisaje rojizo, sino por pronunciar ‘Uluru’ cada vez que hablemos sobre el viaje.
El caso es no caer en los tópicos. Y eso mola. Le damos chance a nuestras citas del Tinder, ¿no se lo vamos a dar al mundo? El “Siempre nos quedará París” de Casablanca, se nos queda corto: “Siempre nos quedará el mundo”, nos encaja más. Bon voyage!
