Ay, el verano. Esos estragos del calor, ese dormir a 30 grados delante de un ventilador, esa playa repleta de gente con tuppers de tortilla de patata, un ¿placer? al que estamos más que acostumbrados los que residimos cerca de sitios turísticos.

‘¡Qué envidia!’, nos dicen algunos. ¡Cómo si nos pasásemos el día sin trabajar en la tumbona! ¡Hombre ya! Un minuto de silencio para los que no podemos disfrutar del verano por estar encerrados en una oficina.

Pero a lo que íbamos. No todo va a ser arena y sol -y el mar azul-. Hay muchas otras posibilidades para disfrutar de un día diferente en plena temporada veraniega y está en nuestra mano saber aprovecharlas bien. Basta de planes de bañador y chanclas, por favor. Hoy proponemos sacar el kimono del armario y lanzarse a la calle. Apetecible, ¿verdad?

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El boom japonés en España es una realidad. Nos hemos vuelto expertos en sushi y makis y recitamos nombres de algas como si fuesen los ingredientes de la paella. Así de cosmopolitas somos, ¿vale? Pero la oferta de actividades relacionadas con el país nipón es tan amplia -sobre todo, en ciudades grandes- que resulta imposible no perderse por el camino. ¿Y si hay un restaurante mejor del que vamos habitualmente? ¿Y si existe una tienda mágica que tiene todas las salsas del mundo? ¿Y si podemos conseguir esas cerámicas que vimos en aquel viaje a Japón sin tener que pagar gastos de envío? ¡Pues para eso estamos aquí los Houdinis! ¿Quién se anima a hacer una ruta japonesa por el centro de Barcelona? Venga, a por las mochilas, que tenemos día por delante.

Libros y comida, ¿qué más se puede pedir?

Quedamos con Alex, propietario de la librería ‘Haiku Barcelona‘ (C/ Montseny, 7), en pleno barrio de Gracia. Como buen experto en todo lo que viene de Japón, le hemos pedido que nos haga de guía en esta improvisada escapada. Nos cuenta que hace pocas semanas regresó de uno de los dos viajes que hace cada año para traer productos que no vamos a poder encontrar en ningún otro sitio -¡exclusiva!- y contactar con proveedores y mayoristas. Y es que no solo de libros vive el hombre -que también, ¿eh?-. Utensilios de cocina, papel para origami, muñecas japonesas, el gato que sube y baja el brazo -‘Maneki-nekos’, nos apunta por el pinganillo-, de todo. Ahí empezamos la ruta, claro. ¡Esto promete, amigas y amigos!

Una publicación compartida de MOLLY (@__nmee) el


Le pillamos organizando uno de los talleres que se imparten en la tienda a lo largo del año. Desde cursos de japonés -incluso uno para turistas aterrorizados por no saber pedir ni un café- hasta dibujo manga, encuadernación, caligrafía o un club de lectura, claro, que estamos en una librería. Y por si todo esto no fuese suficiente, también acaba de inaugurar ‘Haiku Gourmet‘ (C/ Sant Domènec, 5), una tienda especializada en alimentación a tres calles de la librería. Y como en Houdinis somos de naturaleza disfrutona, en cuanto escuchamos hablar de comida, nos entra hambre. ‘¿Comemos? ¿Comemos? Eh… ¿Comemos?’. ¡Y vaya si lo hicimos! Unos udon que nos dio energías para todo el día en ‘Yoi Yoi Gion‘ (Av. Diagonal, 383). Así ya podemos continuar con la ruta.

 ¿Y si me confecciono mi propio kimono en casa?

Dando un pequeño paseo, nos acercamos a ‘Nunoya‘ (C/ Trafalgar, 14), una tienda especializada en telas japonesas situada en pleno centro de Barcelona. ¿Existe la expresión ‘orgasmo textil’? Pues alguien debería inventarla ya que es lo que se siente cuando se entra en ese paraíso. Todo tipo de tejidos, tanto en venta directa como al por mayor, que nos llevan a querer aprender a coser -ay, ¡qué contenta se pondría mi abuela!- para hacernos nuestra ropa en casa. Y bueno, si lo de las agujas no es lo nuestro, siempre podemos elegir la tela y acudir al servicio de confección que ofrece la propia tienda. Menos mal que alguien piensa en los patosos… ¡Menos mal!

Y ya que tenemos la cartera a mano -maldita paga extra, no te lo perdonaré jamás-, terminamos acercándonos hasta el barrio Gòtic para visitar ‘Momo’ (C/ Arc de Sant Ramon del Call, 6), una remanso de paz en forma de tienda donde podremos comprar todo tipo de cerámica y artesanía, tanto japonesa, como de China o Vietnam. La estrella, claro, todo lo relacionado con la ceremonia del té, pero no se queda ahí la cosa. Si todavía os quedan algunos eurillos antes de llegar a fin de mes -lloramos fuerte-, no encontraréis momento mejor para invertirlos. ¡Vamos a ser la envidia de todos nuestros amigos! ¡Risas malignas! Y como tanto ajetreo nos ha vuelto a abrir el apetito -somos un pozo sin fondo-, terminamos la ruta atiborrándonos de sushi en ‘Tokyo Sushi‘ (C/Comtal, 20). Madre mía, qué bien nos sienta Japón…

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Nos despedimos de Alex encantados -también empachados- y con cierta pena por haber terminado esta estupenda ruta. Nos recomienda, para futuros viajes, que no nos olvidemos de visitar la pastelería ‘Otchiai‘ (C/ Comte d’Urgell, 110), la tetería ‘Usagui‘ (C/ Santjoanistes, 28) o el bar de tapas ‘Yatai‘ (C/ Comte d’Urgell, 112). “Es como comer en Japón”, nos apunta. Ay, ¡cómo nos conoce! Si es que somos de un fácil contentar que da gusto. ¡Da gusto!

‘¡Qué envidia!’, nos dicen algunos. ¡Cómo si nos pasásemos el día sin trabajar en la tumbona! ¡Hombre ya! Un minuto de silencio para los que no podemos disfrutar del verano por estar encerrados en una oficina.

Pero a lo que íbamos. No todo va a ser arena y sol -y el mar azul-. Hay muchas otras posibilidades para disfrutar de un día diferente en plena temporada veraniega y está en nuestra mano saber aprovecharlas bien. Basta de planes de bañador y chanclas, por favor. Hoy proponemos sacar el kimono del armario y lanzarse a la calle. Apetecible, ¿verdad?

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El boom japonés en España es una realidad. Nos hemos vuelto expertos en sushi y makis y recitamos nombres de algas como si fuesen los ingredientes de la paella. Así de cosmopolitas somos, ¿vale? Pero la oferta de actividades relacionadas con el país nipón es tan amplia -sobre todo, en ciudades grandes- que resulta imposible no perderse por el camino. ¿Y si hay un restaurante mejor del que vamos habitualmente? ¿Y si existe una tienda mágica que tiene todas las salsas del mundo? ¿Y si podemos conseguir esas cerámicas que vimos en aquel viaje a Japón sin tener que pagar gastos de envío? ¡Pues para eso estamos aquí los Houdinis! ¿Quién se anima a hacer una ruta japonesa por el centro de Barcelona? Venga, a por las mochilas, que tenemos día por delante.

Libros y comida, ¿qué más se puede pedir?

Quedamos con Alex, propietario de la librería ‘Haiku Barcelona‘ (C/ Montseny, 7), en pleno barrio de Gracia. Como buen experto en todo lo que viene de Japón, le hemos pedido que nos haga de guía en esta improvisada escapada. Nos cuenta que hace pocas semanas regresó de uno de los dos viajes que hace cada año para traer productos que no vamos a poder encontrar en ningún otro sitio -¡exclusiva!- y contactar con proveedores y mayoristas. Y es que no solo de libros vive el hombre -que también, ¿eh?-. Utensilios de cocina, papel para origami, muñecas japonesas, el gato que sube y baja el brazo -‘Maneki-nekos’, nos apunta por el pinganillo-, de todo. Ahí empezamos la ruta, claro. ¡Esto promete, amigas y amigos!

Una publicación compartida de MOLLY (@__nmee) el


Le pillamos organizando uno de los talleres que se imparten en la tienda a lo largo del año. Desde cursos de japonés -incluso uno para turistas aterrorizados por no saber pedir ni un café- hasta dibujo manga, encuadernación, caligrafía o un club de lectura, claro, que estamos en una librería. Y por si todo esto no fuese suficiente, también acaba de inaugurar ‘Haiku Gourmet‘ (C/ Sant Domènec, 5), una tienda especializada en alimentación a tres calles de la librería. Y como en Houdinis somos de naturaleza disfrutona, en cuanto escuchamos hablar de comida, nos entra hambre. ‘¿Comemos? ¿Comemos? Eh… ¿Comemos?’. ¡Y vaya si lo hicimos! Unos udon que nos dio energías para todo el día en ‘Yoi Yoi Gion‘ (Av. Diagonal, 383). Así ya podemos continuar con la ruta.

 ¿Y si me confecciono mi propio kimono en casa?

Dando un pequeño paseo, nos acercamos a ‘Nunoya‘ (C/ Trafalgar, 14), una tienda especializada en telas japonesas situada en pleno centro de Barcelona. ¿Existe la expresión ‘orgasmo textil’? Pues alguien debería inventarla ya que es lo que se siente cuando se entra en ese paraíso. Todo tipo de tejidos, tanto en venta directa como al por mayor, que nos llevan a querer aprender a coser -ay, ¡qué contenta se pondría mi abuela!- para hacernos nuestra ropa en casa. Y bueno, si lo de las agujas no es lo nuestro, siempre podemos elegir la tela y acudir al servicio de confección que ofrece la propia tienda. Menos mal que alguien piensa en los patosos… ¡Menos mal!

Y ya que tenemos la cartera a mano -maldita paga extra, no te lo perdonaré jamás-, terminamos acercándonos hasta el barrio Gòtic para visitar ‘Momo’ (C/ Arc de Sant Ramon del Call, 6), una remanso de paz en forma de tienda donde podremos comprar todo tipo de cerámica y artesanía, tanto japonesa, como de China o Vietnam. La estrella, claro, todo lo relacionado con la ceremonia del té, pero no se queda ahí la cosa. Si todavía os quedan algunos eurillos antes de llegar a fin de mes -lloramos fuerte-, no encontraréis momento mejor para invertirlos. ¡Vamos a ser la envidia de todos nuestros amigos! ¡Risas malignas! Y como tanto ajetreo nos ha vuelto a abrir el apetito -somos un pozo sin fondo-, terminamos la ruta atiborrándonos de sushi en ‘Tokyo Sushi‘ (C/Comtal, 20). Madre mía, qué bien nos sienta Japón…

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Nos despedimos de Alex encantados -también empachados- y con cierta pena por haber terminado esta estupenda ruta. Nos recomienda, para futuros viajes, que no nos olvidemos de visitar la pastelería ‘Otchiai‘ (C/ Comte d’Urgell, 110), la tetería ‘Usagui‘ (C/ Santjoanistes, 28) o el bar de tapas ‘Yatai‘ (C/ Comte d’Urgell, 112). “Es como comer en Japón”, nos apunta. Ay, ¡cómo nos conoce! Si es que somos de un fácil contentar que da gusto. ¡Da gusto!

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Bloguer con solera. Profesional de la palabra. Vedette del freelancismo. Inventor de la confusión. Me gano la vida escribiendo y gestionando mi imperio. Es duro, pero merece la pena.